viernes, 12 de diciembre de 2008

Alfa y Omega

Como que ponerle un alto a la vertiginosa velocidad de la realidad que nos rodea fuera posible y la gente dice que "hay que recuperar el tiempo perdido" como que el tiempo fuera un objeto con forma reconocible, o como que se pudiera detener el avance de la vida-no hablo de el reloj que siempre es posible adelantarlo o retrocederlo o dejarlo muerto sobre la mesita de noche- la realidad concreta-permítanme ser enfático en esto-viaja con una rapidez que no permite parpadeo, no se detiene a recoger pasajeros o a capear baches, no le interesa si son ancianos o niños los que se quieran embarcar, la vida real no conoce de riendas, arrastra a cualquiera que se ponga en su camino, no respeta horarios, ni dolor, ni alegrías, ni conoce de días feriados: se mueve, avanza, destruye o construye pero jamás se detiene...pero no olvidemos que tenemos el recurso de la imaginación, ese bichito que permanece dormido a la orilla del camino esperando a que el ruido de nuestras pisadas vaya a despertarlo. Después de todo, la defensa está permitida.

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