PARTE DE GUERRA 1.0

Las guerras, al igual que el progreso, dejan un reguero de muertos, mutilados, desaparecidos, huerfanos, viudas, locos y náufragos-me seduce la imagen de náufragos como causa de la guerra-. Después que el polvo se asienta y el retumbo de los cañones se calla, nadie se hace responsable de recoger los escombros y sanar las heridas. Los ganadores, aunque dudo mucho que después de las guerras alguno de los bandos en conflicto se pueda llamar o considerar ganador, se llevan el botín e izan su bandera en el punto más alto del territorio conquistado. Las futuras generaciones, hijos y nietos de los vencedores, apenas recibirán ecos de un pasado distante-en el tiempo y en el espacio- y disfrutarán de los réditos logrados gracias al sufrimiento ajeno...pero llegará el día en que ambos bandos tendrán que sentarse a llorar por el pasado, a reconocer culpas, a intentar atar los nudos de la historia, a desenredar la maraña de confusiones y razones que cada uno ha tenido para hacer lo que ha hecho y, más importante aún, a intentar reconciliar el pasado irremediable con un futuro que apenas se insinúa...estos procesos toman tiempo y paciencia, pero son necesarios si es que queremos heredar a nuestros hijos el futuro que se merecen...