sábado, 2 de agosto de 2008

En Boca Cerrada

Por más de una semana he tenido la intención de desatarme en contra del mal aliento y sus consecuencias en las relaciones ínter personales- usted interprete ínter personales de la manera que quiera, a mí me da igual-. He querido putear a los que botan basura en cualquier parte y a cualquier hora-en privado, claro está- porque decirle a alguien: "tienes mal aliento" es tan o más difícil que regañar a alguien por ensuciar las calles, parques, buses...cuál será la solución a esta plaga del nuevo milenio?? Yo he sido testigo de personas que teniendo el contenedor de basura casi en las narices, optan por lanzarla sobre la cuneta...lo peor de todo es que lo hacen gente de los mercados, los policías, estudiantes universitarios, vendedores ambulantes, doctores-con sus gabachas blanquísimas-, padres de familia, sacerdotes, maestros...es un mal generalizado. Pero lo más interesante es que cuando estamos en un país extranjero no echamos la basura en cualquier lugar, la cargamos, la ponemos en una bolsita y esperamos a pasar junto a un recipiente apropiado para deshacernos de la carga indeseada, pero una vez que atravesamos la frontera y regresamos a la patria, retomamos el comportamiento habitual de ensuciar por donde pasamos
...y nos vale verga que una pancarta diga:
PROHIBIDO BOTAR BASURA EN ESTE LUGAR.
SE APLICARA MULTA DE 5,000 CORDOBAS.
"ALCALDÍA DE MANAGUA".
Después de todo, un pedazo de lata no puede cambiar una costumbre que nos tomó décadas aprender. Hasta parece que lo malo fuera poner la basura en el lugar que le corresponde...Reciclar es un concepto que todavía no entendemos...
Ah, contra el mal aliento, lo mejor es quedarse con la boca cerrada!!!!

1 comentario:

Kendal Sparks dijo...

No solo es algo de Nicaragua, broder. Pasa mucho en mi pais, tambien. No me gusta para nada...