miércoles, 7 de mayo de 2008

Legado

Desde tierna edad nos enseñan a encerrarnos en nosotros mismos, a desconfiar de la gente, a poner candado a la puerta y asegurar la tranca detrás de la ventana antes de irnos a dormir. "No hables con desconocidos" y cómo putas creen que vamos a conocer a alguien si no se puede hablar con desconocidos?? Los niños y las niñas no deben jugar las mismas cosas; los niños son muy toscos y las niñas muy débiles, el color azul es masculino y el rosado es femenino, los niños juegan con pistolas de plástico y carritos, las niñas juegan con muñecas y con la escoba. Tengo un tío que se llama Mercedes y por su nombre, todo el mundo cree que es mujer. Fumar también es cosa de géneros; han visto a alguna mujer haciendo un comercial para cigarrillos? Me encanta pensar que el "Hombre" Marlboro en realidad es una mujer. Y los electrodomésticos también son "aparatos" con género; los hombres hacen comerciales de televisores. Aparecen un grupo de hombres viendo un partido de fútbol...que gran comercial. Las mujeres muestran lo efectiva que es una licuadora, el gran espacio interior de una refrigeradora y lo bien que trabaja una lavadora- las pobrecitas planchas están relegadas al olvido-. ¿Solo los hombres usan pantalones? Me sorprende ver que en todos los servicios higiénicos (privados o públicos) se representa a las mujeres con falda y a los hombres con pantalones. Las profesiones también son cosas de testículos u ovarios; han notado la casi nula existencia de mujeres taxistas? ¿Cuántos de ustedes conocen a un enfermero? Y si nos vamos a la moda...ahhh...la moda. Si una mujer no se arregla es una marimacha descuidada, pero si un hombre se arregla, se perfuma y se afeita es un metrosexual-cuidado, no creer que un metrosexual es un hombre al cual el sexo (el aparato) le mide un metro-. Nos han metido en la cabeza que desde el momento de la concepción, hombres y mujeres, venimos con roles ya definidos. La mujer es para parir y cuidar de la casa y los niños, el hombre es para proteger y proveer a la familia. Peor aun, las malas palabras-el lenguaje soez- es solo para los hombres. Las mujeres tienen vedado el placer de pronunciar aquellas palabras que suenan tan delicioso: mierda, me vale verga...no saben de lo que se pierden. Y qué me dicen de los aretes? Por muchos años usé aretes y nunca pensé que estas argollitas de metal tuvieran algo que ver con el pedacito de pellejo que me cuelga entre las piernas. Y las mujeres tiene que llegar virgen al matrimonio...cuidado, madres de familia, cuiden de sus gallinas que el gallo anda suelto...

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