De Frijoles y Guerras a Control Remoto.

Que lindo, cada día mueren varios miles de personas por falta de alimentos mientras las autoridades-siempre me cuestiono si en realidad lo son-, se dedican a demostrarse quién tiene las armas más poderosas, sofisticadas y destructivas. Definitivamente que así lo único que queda demostrado es el alto grado de estupidez que la humanidad ha alcanzado; exterminarnos para sobrevivir. En este mi país de extremos y enredos, el precio del galón de gasolina ya sobrepasó los cinco dólares, la libra de frijoles vale entre 16 y 18 córdobas, el arroz-el buen arroz, no el que se usa para alimentar a las gallinas-, vale 12 córdobas la libra, la libra de pollo alcanzó los 22 pesos y una libra de carne vale 35...y los salarios?? Los salarios están congelados. Es por eso que necesitamos de la guerra. La guerra oxigena la economía y hace que el mercado entre en una acción frenética. Atrás quedaron los grandes inventos junto con sus creadores. La maravilla moderna se llama guerra. Con la guerra se elimina a los débiles-selección natural o si usted lo desea puede buscarle algún otro apelativo-, se establece la democracia, se abren las fronteras, se mantiene el balance de fuerzas, se oxigena la economía, se propician las relaciones interculturales-ahí está el maravilloso ejemplo de Guantánamo y Abu Graib-, y claro, con la guerra se elimina uno de los peores males del siglo que acaba de nacer: el terrorismo. Hacemos la guerra para terminar con la guerra...Y usted, a quién le va?? yo, aunque ultimamente no le ha ido tan bien, me apunto al Barcelona.